Sevilla estrena una feria ganadera que reúne vendedores y compradores de toda Andalucía.

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Pronto surgen tenderetes, casetillas y puestos. Saltimbanquis, titiritero y artistas ambientan los tratos entre vino y apretones de mano.

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Las gitanas ataviadas a la zíngara pasean vendiendo flores o paseando el borrico del pariente.

Falda de amplio vuelo con uno o dos volantes, flores y pañuelo. En Sevilla se funden las culturas.

Acompañan su indumentaria con los complementos que solían usar en su vida cotidiana, aretes o pendientesimitando corales.

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En cuanto las señoras de la alta burguesía empiezan a asistir a estas ferias de ganado y lo hacen luciendo sus mantones, mantillas, peinecillos y demás complementos que formaban parte de sus ajuares.

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Pendientes de oro y corales naturales, peinas de carey, mantones bordados de manila.